Siga, según las circunstancias, los siguientes pasos:
Muy importante: no ponerse nervioso, mantener la calma, y evitar que cunda el pánico.
Si el fuego se inicia en algún aparato ó instalación eléctrica, corte la corriente.
Dar la voz de alarma y buscar ayuda si es posible.
Si el edificio dispone de PULSADOR de alarma de incendios, accionar el más cercano.
Avisar al Cuerpo de Bomberos, especialmente si el fuego sobrepasa lo que es un simple conato y se convierte en un incendio considerable.
Situándose entre el fuego y una puerta ó vía de escape, y si se trata de un conato de incendio, y lo considera factible, intente reducir el fuego con los medios a su alcance (extintores, MANGUERAS de BIE’s), en función del tipo de fuego y de sus características y teniendo en cuenta lo siguiente:
Extintores CO2: fuego por corriente eléctrica y/ó de combustibles líquidos.
Extintores Polvo: fuego de combustible sólido (brasas), líquido ó gaseoso, y de corriente eléctrica (baja tensión).
Extintores Hídricos: fuego de combustible sólido (brasas), líquido ó gaseoso. NUNCA bajo corriente eléctrica.
Boca de Incendios Equipada con manguera (BIE): es conveniente utilizarla, al menos entre dos personas, y mejor tres:
1ª manejo válvula apertura
2ª control boquilla -lanza-
3ª apoyo 2ª (sujeción manguera).
Localice las posibles vías de escape.
Si se prende fuego a su ropa, no corra: túmbese en el suelo y ruede sobre sí mismo para apagarlo.
En caso de tener que evacuar, al abandonar locales incendiados, vaya cerrando tras de sí las puertas, y gatee ó avance a nivel del suelo para evitar el humo; piense que el humo puede ser el problema más difícil de superar. Antes de abrir puertas cerciórese con la mano que noqueme, porque podría haber llamas detrás.
No utilice los ascensores ni montacargas (podría quedarse encerrado por corte de suministro eléctrico): escape por escaleras, y siempre siguiendo la señalización de emergencia.
Si no puede escapar, permanezca con la puerta cerrada obturando ranuras y rendijas con ropas ó telas mojadas. En la medida de lo posible, hágase notar en la zona para que puedan localizarlo, e intente evacuar el humo abriendo ventanas.
Recomendaciones preventivas:
El pequeño gasto que puede suponer disponer de un extintor apropiado, e incluso de detectores de incendios y/ó gas, no es nada comparable con lo que tratan de proteger: sus bienes y, sobre todo, SU VIDA.
Procure localizar siempre los medios de lucha contra incendios y las salidas de evacuación de los edificios, por sí acaso.
Respete las normas de seguridad y de sentido común para evitar accidentes, también en el hogar (especial atención en las cocinas).
No está de más formarse mínimamente en la lucha contra incendios.
Como emplear correctamente un EXTINTOR de incendios:
Es fácil tener siempre a mano un extintor (piense que el primer extintor de incendios puede ser un simple vaso de agua).
Si se pierde el control de un incendio por no haber intervenido a tiempo puede llevarnos a una catástrofe tremenda.
El extintor es el medio más inmediato que tenemos para sofocar el fuego, siempre en los momentos iniciales, cuando el incendio aún es un conato. Debe estar instalado en lugar perfectamente visible, accesible, señalizado y repartido convenientemente según el riesgo a proteger; por eso hoy en día todos son de color rojo, color de seguridad, que ayuda alocalizarlo inmediatamente. No es un elemento decorativo, sino una herramienta que nos puede salvar la vida. Es importante que conozcamos su funcionamiento.
Como no es algo que se vaya a usar de manera habitual, sino sólo en caso de emergencia, es vital mantenerlo en perfecto estado de funcionamiento.
El propietario es el responsable de su mantenimiento.
Funcionamiento general de los extintores:
1.Desprecintar el seguro, normalmente tirando de una anilla ó pasador.
2.En exterior, procurar ponerse con el viento a favor, para que el agente extintor no venga sobre nosotros restando visibilidad, ni nos afecte el calor, así como que no pueda el viento reavivar zonas sofocadas.
3.Presionar la maneta de la válvula de disparo progresivamente, poco a poco, controlando la salida de agente extintor según la dimensión del fuego, a la vez que se dirige el chorro de la manguera ó boquilla a la base de las llamas.
4.Mover el chorro avanzando en zig-zag según se vaya apagando el fuego, y asegurándose de que no dejamos zonas en donde se pueda reavivar el fuego.
5.Una vez sofocadas las llamas, si era de combustibles sólidos, esparcir los brasas y “ahogarlas” hasta cubrirlas bien con el agente extintor que nos quede.
6.Si el fuego era de combustibles líquidos ó partículas finas hay que procurar no apuntar directamente a la base, sino más superficialmente, para evitar que se esparza y extender el incendio.
7.Si el combustible es gaseoso el procedimiento aconsejado, si es posible, es cerrar las llaves de paso del mismo.
8.Cuando se utilizan extintores de CO2 (anhídrido carbónico) hay que tener muy en cuenta que, debido a las bajas temperaturas a las que se encuentra cargado, al dispararlos nunca se debe sujetar la lanza ó boquilla por una zona extrema ó desprotegida, ni por las uniones roscadas, porque se pueden sufrir quemaduras considerables por baja temperatura.
9.Es obligatorio recargar un extintor después de su uso, aunque sólo se haya gastado parcialmente (puede haber perdido la presión ó ser insuficiente para otra ocasión).
Mantenimiento mínimo (reglamentario):
1.Revisión cada año por una Empresa Mantenedora Autorizada, y control trimestral por parte del usuario ó propietario.
2. Pruebas de presión y retimbrado cada 5 años.
3.Recarga después de su descarga total ó parcial.
4.Retirada definitiva tras 20 años (desde su fecha de fabricación).